Buenas noches, buen descanso

El descanso es un factor primordial para la salud y el bienestar en todas las etapas de la vida, desde la niñez hasta la edad adulta.

El ritmo de vida que tenemos, a veces nos lleva a pensar que nuestro cuerpo es una máquina y que cuánto más lo exijamos, más rinde por eso nunca tiene que parar.

El ritmo de vida que tenemos, a veces nos lleva a pensar que no podemos parar, que nuestro cuerpo es una máquina y que, cuánto más lo exijamos, más rinde. Pero esto no es así.

La salud es un equilibrio que se logra cuidando muchos factores: una buena alimentación, tener vida social, los afectos, proyectos, una buena hidratación, evitar excesos, la actividad física y fundamentalmente un buen descanso es un factor clave.

El descanso no tiene que ser el tiempo que nos sobra luego de las tareas diarias. Tenemos que darle un lugar en cada día. Podemos programar algunos momentos durante la jornada diaria y principalmente prepararnos para un reparador descanso nocturno.

Cuando descansamos permitimos que nuestro cuerpo recupere energías. Si durante la noche logramos dormir ocho horas diarias, la memoria mejora, el sistema inmune se fortalece, la presión sanguínea baja, la inflamación en el cuerpo se reduce, la concentración y capacidad mental mejoran, y tendrás más energía y mejor humor.

Es por eso que desde el programa de La Salud en Nuestras Manos, queremos advertir sobre la importancia de mantener un buen descanso diario. Y para eso, el equipo consultó con varias/os profesionales de la obra social, para que nos acerquen algunos consejos útiles a la hora de planear nuestros descansos nocturnos.

CONSEJOS PARA TENER UN BUEN DESCANSO NOCTURNO:

  • Antes de acostarnos: reduzcamos el consumo de estimulantes
    Como el café, alcohol, mate, cigarrillo, chocolate.
  • Limitemos las siestas
    Entre 20 a 60 minutos es suficiente.
  • Hagamos ejercicio físico
    Mantengámonos activos durante el día.
  • Limitemos el uso de pantallas
    Un rato antes de acostarse, disminuir la exposición a las pantallas de TV, computadoras y celulares.
  • Comamos liviano
    Evitemos cenar pesado para tener una digestión liviana antes de acostarnos.
  • Mantengamos horarios regulares
    Acostarse a dormir todas las noches a la misma hora.
  • Usemos un colchón suficientemente duro
    Para que no se hunda con el peso del cuerpo, evitar usar un colchón que esté deformado.
  • Durmamos boca arriba o de costado
    Usar almohada que no sea tan alta que se flexione la cabeza hacia arriba, ni muy baja que se flexione hacia abajo.
  • Evitemos hacernos mala sangre
    Evitar situaciones de enojo, estrés, ansiedad o preocupación.
  • Preparémonos para un buen descanso
    Tomar un baño relajante, leer, meditar, bajar la intensidad de las luces, escuchar música relajante, etc.

Para todos aquellos/as afiliadas que sufran de trastornos del sueño, como el insomnio, es importante que consulten con un especialista.

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